E L M I E D O

El Miedo es la reacción que se produce ante un peligro inminente. Es una sensación de angustia provocada por la presencia de un peligro real o imaginario. Es un sentimiento de alarma de nuestro cerebro que se activa ante una amenaza. Miedo es una emoción desagradable, pero muy saludable, necesaria y adaptativa. Cuando es intenso y extremo, el miedo lleva a un bloqueo emocional que en muchas ocasiones nos paralizamos; la consecuencia es que nos anula la capacidad de reacción o buscar soluciones. Cuando sentimos miedo creemos que tenemos baja capacidad de control y de predicción; pero consideramos que necesitamos hacerle frente de manera inminente, y para ello, movilizamos una serie de comportamientos. El miedo es inevitable y el sufrimiento que produce es opcional. Los temores se curan aprendiendo a disfrutar la vida, mirando hacia el futuro con ilusión y viviendo el presente en forma equilibrada. Nada grande en la vida comienza sin un poco de miedo. La gestión de las emociones es el gran éxito a la puerta de entrada al equilibrio personal y al bienestar social. De esta forma nos convertimos en lo que somos; porque la mente es todo. Pero lamentablemente hoy en día, el genocidio que sufre nuestra población del Planeta con pandemia covid-19, originado por la Élite del NOM, para reducir la población mundial a 500 millones de habitantes, de los 7, 800 millones que existen en la actualidad. Este genocidio, no sólo ha generado miedo, sino también: estrés, depresión, angustia, terrorismo e incertidumbre a la humanidad. Es decir, este organismo de poder oculto ha conseguido su objetivo de mantener a la población mundial enferma mentalmente.

Asimismo, el filósofo de la India Bhagwan Shree Raynesh, más conocido como OSHO, afirma: El miedo es lo contrario de libertad. El miedo es natural, pero no dejes que te atrape. Todo ser humano desde su nacimiento está creando miedo. Ningún niño nace con miedo. Todos los niños nacen con libertad, duda, rebelión, individualidad e inocencia; pero son indefensos y dependientes. Si todo fuera como quisiéramos que sea y no hubiera espacio para incertidumbre, no seriamos seres humanos, sino máquinas; ya que sólo para ellas todo es seguro y cierto. El hombre vive en libertad y ésta se viste de inseguridad, de incertidumbre. El miedo es parte de estar vivo, parte de ser delicado, parte de ser frágil. La vida es inseguridad. Cada momento nos lleva a una inseguridad más profunda; es un juego en el que nadie sabe cuál será el siguiente paso. Por ello, si tienes miedo acéptalo como parte de tu ser; si puedes aceptarlo, ya ha desaparecido; porque a través de la aceptación, el miedo desaparece; a través de la negación, el miedo se acrecienta. El miedo crea energía y ésta no puede ser sustituida, sólo se puede cambiar su forma. El miedo siempre es miedo a lo desconocido, ha estar perdido, a la muerte. Miedo ha no hacerte un nombre en el mundo, miedo ha no ser nadie. En el hombre existen dos posibilidades: El Miedo y el Coraje. Todo depende del que escojas. El miedo te incapacita; el coraje también te destruirá, pero te dará un renacimiento porque es muy creativo. Sólo hay una cosa en la vida que conquista a la muerte, y eso es, el amor.